La educación de los niños también debe incluir la buena alimentación y una buena manera de comenzar a enseñarles como llevar buenos hábitos alimenticios es cocinando en familia.
Cocinar en familia es mucho más que estar juntos en la cocina, es aprender cuáles son los alimentos saludables, las mejores formas de cocción y hacer que los niños se interesen por este tema pero a través de una actividad divertida.
Además, es una excelente forma de fortalecer la relación con los hijos y hacer que los niños desarrollen nueva capacidades. Una buena idea es planificar y organizar los menús de la semana incluyendo platos que puedan prepararse en familia.
Gracias a cocinar en familia es posible:
Valorar a planificación
Cuando los niños se involucran en la preparación de la comida aprender a planificar un menú, comprar los ingredientes necesarios y elegir productos saludables para la creación de platos sabrosos.
Conocer nuevos sabores
Sabemos que es difícil introducir en la dieta de los niños nuevos alimentos y sabores, de ahí que cocinar en familia puede ser el camino para que los peques aprendan a comer más variado.
Poniendo en práctica los conocimientos de los niños
Los niños en la cocina pueden poner en práctica tanto matemáticas como química y todo lo aprendido en el colegio tendrán la posibilidad de verlo plasmado en una comida en la que se mezclan diferentes ingredientes que en muchos casos deben ser medidos o pesados.
Estrechar los lazos de la familia
Evitar que la rutina nos aleje de momentos para disfrutar en familia es esencia para que los niños se integren a tareas en las que también sus padres se involucran.
Lo ideal es elegir al menos 1 día a la semana para cocinar juntos en familia como una forma de encontrar un espacio para compartir experiencias.
Aumentar el autoestima
Los niños adoran ser reconocidos cuando hacen bien las cosas y por lo tanto involucrarlos en la preparación de una comida puede resultar excelente para aumentar su autoestima.
Aprender a apreciar la comida casera
Todos sabemos que los niños adoran la comida “chatarra” por ello es muy importante que ellos se involucren en la preparación de platos totalmente preparados en casa.
Además, los peques comprenderán el trabajo que es preparar un plato y esto hará que aprecien más a sus padres cuando cocinan para ellos.
Comenzar con recetas sencillas
Cocinar en familia debe ser sinónimo de recetas sencillas y fáciles de preparar que además no generen ningún tipo de peligro para los niños.
Ellos estarán seguros en la cocina primero porque sabrán cómo funcionan los aparatos y segundo porque tendrán una noción básica de cómo solucionar cualquier problema que pueda suscitarse.
Lo ideal para comenzar a cocinar en familia es proponer recetas sencillas con alimentos saludables y que den la posibilidad de que los niños puedan crear platos coloridos y sabrosos.
Hay que comenzar poco a poco y elegir al menos un día a la semana para cocinar en familia, pero por sobre todas las cosas hacer platos divertidos que son los que los niños adoran.