¿Os animáis a llevar un look chic o elegante para esta temporada? Optad sin duda alguna por la falda plisada, que vuelve con fuerza a nuestro fondo de armario desde hace algún tiempo.
El resurgir de la falda plisada
Durante mucho tiempo asociada a un look de colegiala, la falda plisada es hoy en dÃa la pieza maestra de las fashionistas. Esta prenda de estilo ligeramente arrugada, fue la panacea de las entusiastas de la moda en los años 1950.
Desde Marilyn Monroe a la celebérrima Brigitte Bardot, la falda plisada se llevaba en aquella época bastante larga o hasta la rodilla. La versión corta forma parte hoy en dÃa de los looks más atrevidos y que podemos ver en todas las pasarelas, asà como en la calle.
La falda plisada larga y sobria era un signo de distinción en Chanel, Marc Jacobs Cacharel, o Hermès, pero se hace más difÃcil de llevar en mujeres que prefieren un look clásico. Esta dualidad forma parte de la fuerza de la falda plisada que pensábamos que habÃa desaparecido de la esfera de lo fashion durante varios años.
Confeccionada con un tejido fluido en strech o algodón, esta pieza se adapta a todas las morfologÃas. Se lleva igualmente en cualquier circunstancia, pero requiere un poco de imaginación para asociarla con otros complementos.
La falda plisada, para feminizar el look
La falda plisada se lleva de dÃa como de noche, pero de forma diferente. Si optáis por el microlook, se debe poner el acento en el calzado de tacón en el mismo estilo que los Derbys o los Richelieu. Con unas alpargatas con plataforma queda muy bien.
Las mujeres que tienen la costumbre de ir más sexys, podrán mostrar sus piernas sin ningún tipo de complejos. Si por el contrario dudáis a la hora de llevar una falda plisada corta, se puede optar por unos legging o un tregging ligero, casi transparente, para tener un aspecto todavÃa más femenino.
Por la noche, la falda plisada se lleva bien con unos escarpines de tacón alto. Los modelos confeccionados a base de encajes desestructurados son ideales para una velada de corte más joven.
Se puede optar por una chaqueta entallada, que realce vuestra figura y la forma de la falda. Por otro lado, conviene evitar llevarla con un polo. La microfalda escocesa o con motivos celtas no conviene en una mujer más madura.