El día de tu boda te permite disfrutar de todos los detalles de una jornada para el recuerdo después de muchos preparativos. La felicidad de una boda se disfruta de forma anticipada a través de la planificación, después se saborea al cien por cien durante la celebración y, finalmente, queda en el recuerdo para siempre. ¿Cuáles son los cinco momentos más especiales en el día de la boda?
1. El vestido de novia
Después de haber dedicado tanto tiempo a decidir todos los detalles, hoy sientes que el vestido de novia viste tu piel con una dosis de romanticismo y autoestima. Además, también recibes el feeback de otras muchas personas que te quieren y te repiten “qué guapa estás”.
2. Encuentro con la pareja
Uno de los momentos más esperados de ese día es ese instante en el que el “sí quiero” representa la promesa de eternidad propia del amor. Has compartido muchos momentos durante el noviazgo con tu pareja, sin embargo, en este instante de la celebración de boda, un instante de promesas, os sentiréis como si estuvieseis solos incluso estando rodeados de gente. Es decir, dada la trascendencia del momento, se crea un clima de intimidad muy agradable.
Gratitud hacia amigos y familiares
La compañía de las personas más importantes para ti. Durante el día de tu boda, todos los invitados son importantes. Pero algunos tienen más trascendencia en tu vida, por ejemplo, tus padres. Poder disfrutar de este día con ellos es ya una alegría en sí misma. Igualmente, te alegrará la presencia en la boda de tu mejor amiga.
4. El baile
La música se convierte en la mejor banda sonora del día de la boda. El baile es un acto de celebración. Un claro ejemplo de disfrute y diversión. Por tanto, también guardarás grandes recuerdos de este momento en el que no solo compartirás instantes de pareja, sino también, momentos con tus amigos y familiares. Uno de los recuerdos más agradables que tendrás siempre del día de tu boda es el de ser anfitriona.
5. Fotografías de recuerdo
En este día te sentirás tan feliz que tu propia alegría interior será el ingrediente que te haga estar radiante en cada foto. Las fotografías son especiales porque te sientes como la protagonista de una película feliz posando para el objetivo de la cámara, consciente de que el legado gráfico de esas imágenes adquiere valor añadido con el paso del tiempo.
6. El banquete
El menú de boda también es muy apetecible. Pero además, más allá del plano gastronómico, este menú también adquiere un valor emocional ya que en torno a la mesa se producen conversaciones. Sentirás la alegría de observar a tantas personas que quieres disfrutando del momento, brindando con alegría y disfrutando de una jornada para el recuerdo.
El día de la boda se compone de muchos momentos. Muchos instantes. Momentos que en ocasiones, adquieren carácter de ausencia. Por ejemplo, cuando echas de menos a alguien significativo para ti que no puede acompañarte en este día. Disfruta de esta fecha nupcial con todos sus matices.
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