El cabello graso es un problema que tiene solución, pero para comenzar es necesario hacer un diagnóstico correcto sobre el estado de las glándulas que son las responsables de fabricar más sebo del necesario.
El sebo es una especie de aceite que se produce de manera natural para evitar que las fibras capilares se rompan además de otorgarle al pelo un brillo característico que lo hace lucir saludable evitando que el cabello se deshidrate.
Sin embargo, en las personas que sufren los problemas del cabello graso esas glándulas fabrican una cantidad de sebo excesiva y como consecuencia de ello el sobrante de esa grasa se esparce sobre el pelo dándole un aspecto sucio y aceitoso a pesar que en ciertos casos el sebo no cubre todo el cabello y estamos ante un caso de pelo mixto graso en la zona de la raíz y seco en las puntas.
Existen diferentes motivos que llevan a tener pelo graso y uno de ellos es el factor genético. Sin embargo, una de las principales causas de este problema son las hormonas que “dan la orden” de producir mayor cantidad de sebo del que se necesita y esto equivale a una piel y cabello grasos.
Algo que es necesario tener en cuenta es el hecho de que algunas veces el cabello graso es consecuencia de una protección del organismo antes el uso de champús o cremas que no son adecuados, además del abuso de ciertos productos de belleza capilar sobre todo aquellos que tienen como base algún tipo de aceite esencial.
Trucos para evitar un pelo graso
Existen ciertas cosas que es posible hacer para evitar el pelo graso o por lo menos mantener bajo control el problema:
- Tratamientos adecuados: Algunos cuidados especiales para cabellos grasos son sencillos de implementar y sus resultados pueden verse casi de inmediato como usar un champú específico para pelo graso y complementarlo con una mascarilla semanales a base de arcilla que cuenta con propiedades revitalizantes y desinfectantes del cuero cabelludo, tonificando también los folículos pilosos.
- Seguir una dieta equilibrada: La dieta es esencial no solo para estar en forma sino también para evitar problemas en la piel y el cabello. Añadir alimentos con vitamina A será altamente beneficioso ya que mantiene el equilibrio de sebo del cuero cabelludo, estimular el crecimiento del pelo y lo fortalece, eso si siempre de forma equilibrada ya que un abuso puede provocar caída de cabello.
- Hábitos de higiene saludables: Existen ciertos hábitos que se adoptan durante el lavado del cabello que pueden causar que sea más graso, por ello el lavado debe hacerse siempre con movimientos y masajes suaves para no irritar el cuero cabelludo y despojarlo de la cantidad de grasa natural que le sirve de protección.
El enjuague después de haber lavado el pelo con champú es otro punto importante ya que si quedan restos de producto el pelo puede notarse graso a causa de haber quedado restos de champú e inclusive de acondicionador.
Es recomendable utilizar para el enjuague agua casi fría siendo que el agua caliente estimula las glándulas que producen sebo, mientras que dejar que el pelo se seque de manera natural evitará dañarlo y estimular también la producción de sebo más rápido.
Aplicar siempre las cremas hidratantes o nutritivas solo de la mitad del largo de la cabellera hacia abajo no colocando productos en la zona de las raíces capilares ya que solo se contribuye a generar más grasa en esa área.