En nuestro camino para la pérdida de peso, hay muchas ocasiones en las que nosotros mismos hacemos más complicado el proceso. Es más sencillo de lo que parece.
Muchas veces, esa complicación viene dada también por parte de los profesionales, que complican demasiado a los pacientes con dietas realmente extrañas, y en ocasiones poco eficaces.
Desde aquà proponemos un método sencillo que no cause ningún trauma a la persona que lo está haciendo. Creedme, si a los tres dÃas estais muertos de hambre, abandonareis.
La comida
Es cierto que no todos los alimentos son iguales. Cada uno de ellos tiene unas propiedades y está indicado para determinadas cosas. No debemos olvidarlo.
Pero tampoco hay que hacer un Máster para saber qué es lo que más nos conviene para perder unos kilos en general.
El sentido común nos irá dictando en lo que a alimentos se refiere. No todo el mundo sabe la cantidad de calorÃas que tiene un bollo, ni qué cantidad de hidratos y proteÃnas posee, pero sà se sabe que «no adelgaza». Suficiente. No hay que saber más.
No todo el mundo sabe las calorÃas de un filete de ternera y uno de pollo, pero sà sabemos todos que el filete de ternera tiene, en general, más ribete de grasa que el de pollo. Suficiente.
Lo que trato de decir con ésto, es que apliqueis el sentido común. Que los expertos nutricionistas siempre recomiendan lo mismo, frutas, verduras, pescados, etc.
Por tanto, de entre esas comidas, escoged las que más os gusten y combinadlas como prefirais. Serán comidas con poca grasa, y que os harán más beneficio que perjuicio.
Tomad cantidades moderadas. Es preferible eso, a que hagais tres comidas copiosas. Vuestro estómago os lo agradecerá. Es mejor realizar cinco comidas ligeras al dÃa que tres muy cargadas.
El ejercicio
La segunda parte de la dieta, también puede ser divertida. Actualmente la oferta de deportes es inmensa, y no puede ser que no os guste ninguno.
Se trata de que la actividad fÃsica os lleve a la termogénesis o pérdida de grasa, mientras os estais divirtiendo.
Evidentemente, hay deportes más indicados que otros para perder peso, pero para el que quiere perder algunos kilos, cualquier ejercicio de manera continuada, le va a venir bien.
En definitiva, se trata de combinar ambos aspectos, para que ninguno os suponga un aburrimiento total.
Está claro que el culturista que quiere quitarse «lo último» antes de salir a competir, será más restrictivo a la hora de hacer dieta. Sin embargo, aquel que solo quiere perder «algo», tiene la posibilidad de conseguirlo divirtiéndose.