Si hay una parte del cuerpo femenino que las mujeres más odien, esa es, sin duda, las cartucheras. No será la tripa, los brazos, las piernas, ni suiquiera en ocasiones el culo.
Efectivamente todas coinciden en que la visión de frente del cuerpo de una mujer puede quedar desvirtuado debido a esa prominencia lateral, cuya existencia se debe a la disposición de la cadera.
Al estar diseñadas para dar a luz y acoger un feto dentro de su cuerpo, la fisonomÃa de la mujer necesita de esa curvilinealidad, ya que de otra manera la situación serÃa más complicada.
Hay dos tipos de cuerpo de mujer que destacan sobre el resto. Está el grupo tradicional de la mujer de cadera ancha o muy ancha, que por lo general, tiene una talla de pecho normal, y un trasero bastante curvado.
Y en el segundo grupo están aquellas mujeres con gran ausencia de curvas, es decir, las que se pueden ver casi rectas desde cualquier angulo, pero que por lo general, suelen tener pechos de gran talla.
En este último caso, las cartucheras son inexistentes y el culo suele ser casi plano.
Pero la gran mayorÃa no obedece a este biotipo, sino al primero, el llamado de «culo gordo».
Por lo general, esa disposición de la cadera es la que hace que la mayorÃa de las grasas se acumulen en la zona del trasero y laterales.
Por tanto, no debeis cometer el gran error que cometen muchas mujeres, que es ir al gimnasio a la máquina de abductores (la máquina de abrir y cerrar las piernas).
Al contrario de lo que piensan, dicha máquina hará que aumenteis de masa muscular en esa zona, y por tanto, alcanzareis un volumen incluso mayor que el que teneis.
Asà pues, lo mejor que se puede hacer para luchar contra las cartucheras es, aparte de una alimentación equilibrada, deporte aeróbico, que si bien hará que reforceis las piernas, nunca ganareis volumen, ya que no estareis en el umbral anaeróbico.
Tampoco debeis utilizar dietas extremas, ya que aparte de caderas, perdereis todo lo demás, incluyendo pecho. Asà que el cambio hacia una alimentación saludable ha de ser progresivo.
Seguid estos consejos y lograreis reducir la talla de vuestras caderas antes de lo que pensais.