Valencia es una gran ciudad de la Costa Este española que atrae cada año a un gran número de turistas y de visitantes en busca del buen tiempo, de la playa, y de múltiples atracciones culturales y turísticas.
Ciudad moderna, Valencia posee un centro histórico que se integra perfectamente en los edificios de nueva construcción. Castillos y torres medievales se entremezclan con las construcciones de arquitectura moderna y de Art Decó, en medio de las cuales se pueden encontrar numerosas tiendas, restaurantes y cafés.
Valencia no es simplemente un destino de vacaciones, sino una gran ciudad de múltiples actividades y donde la vida no sólo se orienta hacia el turismo, como suele ser el caso en las estaciones balnearias de la costa mediterránea. Al visitar valencia, es posible descubrir la vida y la cultura española en su sentido más estricto.
Las plazas del centro de la ciudad
Las plazas en España son, como en muchas ciudades europeas de importancia, lugares rodeados de árboles, con zonas de sombra para protegerse del sol intenso del verano.
Una de las plazas preferidas de Valencia es la Plaza de la Reina, situada en el centro histórico de la ciudad.
La Plaza de la Reina es un lugar agradable para beber un refresco o una horchata. En todo caso, si se tiene hambre, lo mejor es alejarse un poco del lugar, puesto que puede salir bastante caro tomar o comer algo en uno de estos lugares de interés turístico.
La comida más famosa de Valencia
Si quieres comer en Valencia, la paella es la especialidad local de la región. Sin embargo, la calidad puede variar de un restaurante a otro. Para degustar una buena paella. Conviene encontrar restaurantes donde haya españoles, siempre es un signo de buen acierto.
Existe otra plaza de interés cerca de la Plaza de la Reina, llamada la Plaza Redonda. Esta plaza ha sido restaurada recientemente, lo que le ofrece un encanto muy particular.
Pasear por las calles del centro de la ciudad es un auténtico placer que permite descubrir magníficas plazas y bonitos edificios. No conviene olvidarse de llevar la cámara de fotos, puesto que Valencia es una ciudad llena de encanto y de sorpresas.
El Mercado Central de Valencia
Incluso si la perspectiva de pasearse por un mercado alimenticio no siempre es una de las primeras elecciones que suelen hacer los turistas durante sus vacaciones, el mercado histórico del centro de Valencia es algo diferente y merece la pena visitarlo.
En este mercado se puede aprender un poco más sobre la vida cotidiana de los habitantes de Valencia. El mercado está dividido en secciones diferentes, según el tipo de comida, como el pescado, la carne, las frutas y verduras, etcétera. Un auténtico cóctel de colores, de aromas y sabores.
En los alrededores del Mercado Central, existe un gran número de tiendas, bares y restaurantes, donde poder saciar el hambre tras una visita por la ciudad.
Para todo valenciano que se precie, el arroz es ese alimento capaz de asimilar miles de ingredientes y de sabores, y todo un símbolo de identidad. Pero la preparación del arroz no se limita exclusivamente a la paella. Son muchas las variedades, las recetas, y las maneras de preparar el arroz en Valencia.
La paella
La paella es un plato modesto, pero muy sabroso, que nació en el siglo XVIII en el campo de la huerta de Valencia, y sin duda es la especialidad española más conocida del mundo. Tradicionalmente, la paella la preparaban las mujeres el jueves, y los hombres el domingo. En efecto, el jueves era el día de descanso del servicio, que la víspera preparaba una gran paella para que la dueña de la casa solo tuviera que calentarla al día siguiente.
Esta curiosa costumbre se ha mantenido hasta hoy en día, puesto que la mayoría de los restaurantes de Valencia y del resto de España ofrecen el jueves paella en el menú de mediodía.
La paella del domingo es algo referido casi exclusivamente a los hombres, incluso si la mayor parte de los valencianos prefieren tomarla en el restaurante. No olvidemos que la paella se come al mediodía, solamente los turistas la toman por la noche. Incluso si la paella es un plato de gran sencillez, muchos elementos condicionan el resultado final: la calidad de los ingredientes, por supuesto, pero también la intensidad del fuego, la calidad de los granos de arroz, la composición del agua, la proporción del aceite, etcétera.
La paella se elabora con arroz seco, preferentemente el famoso arroz bomba, en una gran sartén que se llama igualmente paella. El color amarillo del arroz se obtiene gracias al azafrán. Las variedades son enormes, pero una auténtica paella valenciana debe estar elaborada con ciertos ingredientes como conejo, pollo, caracoles de montaña, judiones verdes. No obstante, las variedades más populares son la paella marinera a base de pescado y mariscos, y la paella mixta, a base de pescado y carne.
