¿Queréis adelgazar de forma eficaz y evitar engordar los kilos perdidos después de un régimen? ¿Queréis adelgazar sin practicar deporte? Hoy vamos a descubrir los alimentos que debemos evitar, que debemos priorizar, y cuáles son los consejos de los mejores especialistas. Se trata de un programa sencillo y práctico, y sin riesgos para la salud.
Consejos para adelgazar eficazmente
Para conseguir perder peso es primordial no fijarse objetivos demasiado altos, aceptando una pérdida de peso menos espectacular, pero más duradera. Es decir, que no debemos imponer una pérdida de más de un kilo por semana. Adoptar una alimentación variada es importante. Un régimen serio debe permitir conservar una alimentación en la que todos los grupos alimenticios estén representados.
En un régimen debemos respetar las tres comidas al dÃa. Podemos tomar una pequeña colación hacia las 5 de la tarde, para evitar tener que comer alimentos preparados o industrializados, que son malos para la salud y la pérdida de peso.
Igualmente, no debemos servirnos de un mismo plato varias veces. Reducir las cantidades consumidas, tomándose el tiempo de comer con más lentitud para recuperar de nuevo la sensación de saciedad. Igualmente, una correcta hidratación es necesaria, bebiendo al menos un litro y medio de agua al dÃa.
Los alimentos se deben condimentar razonablemente, utilizando aceite de oliva preferentemente, evitando mantequilla, mayonesa. El aceite de oliva aporta ácidos grasos esenciales que son muy útiles para perder peso. Del mismo modo, comer verduras que contengan fibras, minerales y vitaminas, aumentando asà la sensación de saciedad.
Alimentos que se deben priorizar
La práctica de un régimen no debe provocar, en ningún caso, una sensación de hambre a lo largo del dÃa o al final de la comida. Quedar bien saciado muestra que las necesidades calóricas han sido cubiertas. Por esta razón, alimentarse bien es la condición indispensable para comenzar un buen régimen. Abandonar los malos hábitos alimenticios debe ser definitivo.
El consumo de al menos 5 frutas y verduras por dÃa, frescas o congeladas, o incluso en conserva en cada comida permite sentirse suficientemente saciado.
El consumo de pescado, de 2 a 3 veces por semana como mÃnimo, aporta ácidos grasos buenos para la salud, como los Omega 3. La carne blanca, los huevos o las legumbres son preferibles a la carne roja, que debe ser consumida solo una vez por semana.
Utilizar especias permite realzar el sabor de los platos. También es bueno probar modos diferentes de cocción alternativa, como al horno, al vapor, o a la plancha.
Alimentos que se deben evitar
Debemos limitar los alimentos grasos, salados y azucarados, al igual que el alcohol. La charcuterÃa, las frituras, la reposterÃa y los productos industrializados ultra procesados se deben consumir de forma excepcional, y en cantidad moderada.
No es necesario suprimir el pan, el arroz, la pasta, las legumbres, y las patatas, porque contienen almidón y fibras que reducen la sensación de hambre.
El plato ideal
El plato ideal se compone de un cuarto de proteÃnas: carne, pescado, huevos, legumbres; de un cuarto de féculas: cereales, arroz, pasta, patata, etcétera; y de la mitad de verduras crudas o cocinadas.
Perder peso sin deporte
Ningún régimen se puede practicar sin actividad fÃsica frecuente. Una actividad fÃsica frecuente es indispensable, porque participa en la estabilización del peso y permite repartir armoniosamente la masa muscular, con el fin de llegar a una modificación de la silueta. La Organización Mundial de la Salud recomienda practicar de dos a tres sesiones aproximadamente de 30 a 40 minutos de deporte cada semana.
Se puede tratar de ejercicios de gimnasia, marcha, jogging, natación, bicicleta, etcétera. Lo esencial es practicar una actividad fÃsica de forma frecuente y, sobretodo, progresiva.
Consultar con un médico
Lo ideal es consultar a un médico si se sufre algún problema de sobrepeso importante, antes de cualquier modificación del régimen alimenticio. No olvidemos que un dietista o un médico nutricionista pueden acompañaros para una pérdida de peso duradera y saludable. El seguimiento también permite descubrir algún problema de diabetes, hipertensión, o de hipercolesterolemia y ajustar el tratamiento, si fuera necesario.