En la actualidad es común que las mujeres, para verse y sentirse más seguras de su propio cuerpo, decidan someterse a intervenciones de cirugÃa estética para cumplir ese deseo y los implantes mamarios ocupan los primeros lugares en este tipo de intervenciones.
A pesar que la medicina y sobre todo la rama de la cirugÃa estética han avanzado mucho, aún hoy las organizaciones de salud sugieren tomar ciertos recaudos antes de someterse a este tipo de intervenciones quirúrgicas.
Los implantes mamarios llevan muchos años en el mercado de la estética y ya en 1960 aparecieron los primeros que eran la solución para mujeres que habÃan sufrido una mastectomÃa. Sin embargo, a través de los años la belleza y el deseo de verse mejor los ha convertido en objetos deseados por la mujeres que en ocasiones no miden los riesgos que corren por mala información o por profesionales poco idóneos para realizar tales cirugÃas.
A todo esto se ha sumado una nueva polémica generada por las prótesis fabricadas por la empresa francesa Poly Implant Prothése (PIP), una situación que llevó a las autoridades de ese paÃs a suspender el uso de este material, como también su comercialización y distribución debido al alto Ãndice de roturas que fueron denunciadas tanto por cirujanos como por pacientes que sufrieron ese problema.
Fue asà que la Sociedad de Cirujanos Plásticos de Francia pudo descubrir que la silicona que se utilizaba para producir las prótesis no era la adecuada para uso médico ya que era de tipo industrial y se rompÃa con gran facilidad.
Ante estos episodios tan lamentables y que han generado problemas a miles de mujeres en diferentes partes del mundo, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó sobre la necesidad e importancia de consultar al médico en cuanto se nota algún cambio en los pechos, como también dolor o cualquier otro sÃntoma que puede hacer pensar que algo ha sucedido con el implante.
En la actualidad y como una norma general el material que se utiliza en el exterior de los implantes es silicio y el relleno está compuesto con una solución salina o gel de silicón cohesivo, material que permite ante una rotura de la prótesis que el material de relleno no se expando por el organismo.
Asimismo, un implante mamario solo está indicado para mujeres que ya hayan concluido su etapa de desarrollo y que buscan aumentar el volumen de sus senos, como también para la corrección de alguna cirugÃa anterior o reconstrucciones mamarias.
Por otra parte, no es recomendable para mujeres que padezcan alguna infección en cualquier zona del cuerpo, quienes sufren de cáncer y aún no han terminado su tratamiento o en mujeres embarazadas que están en etapa de lactancia.
Recordando siempre que solo el médico está capacitado para ver y definir las precauciones que deberán tenerse en cuenta antes de someterse a este tipo de cirugÃa, siendo también el responsable de optar por la prótesis que más le convenga a cada una de sus pacientes.
Todo esto se determina a través de diferentes pruebas que se realizan antes de la cirugÃa y después de ella también es el médico quien determinará los cuidados previos y posteriores a la intervención.
La mayorÃa de los implantes mamarios tienen una vida útil de 15 años a pesar que los modelos más recientes pueden durar hasta 20 años. Pasado ese tiempo se aconseja una revisión para verificar si es necesaria otra cirugÃa a fin de ajustar o retirar la prótesis y cambiarla por una nueva.
Por otra parte y con respecto a la calidad de los implantes se aconseja conocer previamente los datos de los mismos que constan en una tarjeta de identificación de cada prótesis, donde se encuentran el modelo, tamaños, numero de serie y el nombre del cirujano que practicó la cirugÃa además de la fecha de colocación.
Por último, es necesario recordar que como en toda cirugÃa la de implantes mamarios implica correr ciertos riesgos que se minimizan eligiendo un profesional capacitado y que posea la certificación que en cada paÃs se otorga para los médicos especializados en esta rama de la medicina.