Después de unos meses conociéndoos, habéis llegado a la conclusión de que lo vuestro va en serio. Lo que un inicio parecÃa un affeir pasajero, ha llegado a tal punto que la seriedad canta por si misma: tú conoces a sus amigos y él a los tuyos, conoces a sus padres, él también conoce a tu núcleo más próximo… En fin, que llegan las primeras fiestas navideñas en pareja, y no sabéis como organizarlo para pasarlas juntos.
Repartir las fiestas navideñas es sumamente complicados, sobretodo cuándo en ambas familias se celebran las mismas festividades en los mismos dÃas. Hay gente que tiene la suerte de poder compaginarse sin desestabilizar mucho a la familia, ya que algunas dan más importancia a la navidad, otras al Fin de años, y otras a los Reyes. El problema suele presentarse cuándo en los dos casos, las celebraciones son las mismas.
Llegar a un consenso entre dos personas que quieren a los que les rodean, es difÃcil. Esto, sin embargo, nos da la seguridad de estar con una persona Ãntegra que quiere y mima a los suyos (por mucho que en este caso, pueda causarnos problemas), como puede serlo ponerse de acuerdo en los dÃas, sin tener ninguna pequeña discusión pudiendo disfrutar de vuestra mutua compañÃa.
Una de las soluciones más fáciles de seguir, y las que mejores resultados da, es simplemente repartir las fiestas: un dÃa en tu casa, otro dÃa en la mÃa y la tercera a suertes. Hay otros, más atrevidos, que prefieren hacerlo por lo grande y juntar las dos familias, aunque la cosa pueda ser incómoda en un inicio y a veces complicada (sobretodo cuándo hay implicada más personas, a las que vemos exclusivamente en estas fechas). También está la opción de ir a comer a un sitio, a tomar los turrones en otro y a cenar en un tercero.
Las opciones son variopintas, sin embargo, hagáis lo que hagáis, disfrutad de la suerte que os ha brindado el destino al haceros conocer a una persona con la que poder compartir estas bonitas fechas.