El pantalón chino, una tendencia que no pasa de moda

Todo comienza en el siglo XIX, cuando la armada inglesa decide equipar a sus soldados en la India con unos pantalones más ligeros y de colores neutros para confundirse con el entorno. En un primer tiempo, esta prenda se llamó «kaki» que significa polvo en indi, y más tarde se llamó «chino», haciendo referencia a los chinos que la confeccionaban.

En los años 70, el chino empieza a convertirse en un pantalón femenino, con ciertos retoques efectuados por sus creadores. Convertido en un clásico del fondo de armario, hoy en día es un pantalón que se puede llevar en cualquier ocasión, y permite una gran variedad de estilos. El pantalón chino es una combinación del pantalón «carrot», y del boyfriend. Este pantalón largo y derecho se caracteriza por su hechura a base de pinzas a nivel de la cintura. Siempre se ha fabricado en algodón, y más recientemente en stretch.

Contrariamente a otros tipos de pantalones, el chino se adapta bien a todas las morfologías de mujer. Es ideal para disimular las curvas y michelines a nivel de las caderas. A nivel de los tobillos es más estrecho, y permite alargar las piernas considerablemente. El chino no se debe llevar nunca demasiado pegado al cuerpo, puesto que produciría el efecto contrario.

Consejos para llevar un chino

Este año, los colores pastel y frescos son los que más se llevan, destacando el coral, el lila o el amarillo mimosa. Para un estilo más cool, se puede llevar con una camiseta, un polo, o un blazer. El conjunto se puede combinar con unas esparteñas, o sandalias planas, y por supuesto llevando un bolso que haga juego.

Para feminizar todavía más el conjunto, se puede optar por llevar un fular y algo de bisutería. Las bailarinas y los derbies ofrecen un look chic y glamuroso. Si sois más bien delgadas, se debe priorizar la parte de arriba, de forma que disimulemos un poco la parte más ancha del pantalón. No dudéis en llevarlo de color fucsia, para un look absolutamente girly. Para las veladas, el pantalón chino de color azul marino, combinado con una blusa clásica es lo más indicado.