La dieta del mango africano se está haciendo conocida como una de las más recientes innovaciones para bajar de peso.
Esta fruta cuyo nombre es Irvingia gabonensis ha ganado popularidad cuando el doctor Mehmet Oz difundió las propiedades beneficiosas que posee para reducir la grasa y por lo tanto bajar de peso.
El mango africano se ha desarrollado como un complemento formado por una multivitamina y vitamina B, siendo la principal característica de esta fruta el hecho de funcionar como una fibra de alto alcance que puede eliminar el colesterol malo y también ayudar a las personas con exceso de peso a perderlo de forma natural.
Se la define como una fruta maravillosa y una gran opción a la hora de bajar de peso naturalmente, siguiendo una dieta adecuada y utilizando este complemento como soporte en un programa de pérdida de peso sin utilizar productos químicos y sin efectos secundarios.
Entre los beneficios que se dice que esta fruta puede ofrecer, además de acelerar la quema de grasas de forma natural aumentando la oxidación de las grasas, siendo excelente para controlar el apetito, sin sensación de nerviosismo ni ansiedad, ayudando también a superar la fatiga ya que mejora la resistencia.
Se asegura además que es el único suplemento conocido que tiene el poder de regular la hormona leptina, que controla la hormona del hambre y la saciedad, teniendo en cuenta que la leptina cumple un papel vital en el control de la ingesta de energía del cuerpo y la salida de ésta, haciendo lo mismo con el metabolismo y controlando el apetito.
Esta fruta es un ingrediente muy utilizado en las comidas tradicionales africanas y su semilla contiene una importante cantidad de aceite.
Según un estudio realizado se pudo determinar que personas obesas sometidas a una dieta para adelgazar lograr perder un peso significativo luego de dos meses de utilizar este suplemento natural.
Los estudios que se vienen realizando sobre el mango de África llevan ya más de veinte años pero recién ahora ha salido a la luz como un excelente complemento natural.
No se recomienda su uso a mujeres embarazadas o en período de lactancia y siempre es aconsejable antes de comenzar a consumirlo hacer la consulta con el especialista.
Se recomienda tomar dos pastillas 3 veces al día una media hora antes del desayuno, comida y cena.