La depilación con hilo es una técnica utilizada en Egipto o en la India. Se trata de una manera natural de desprenderse de los vellos, utilizando un hilo de algodón. Si esta técnica es cada vez más utilizada en los Estados Unidos, al tiempo parece querer implantarse en Europa.
A pesar de la sencillez del material utilizado, no es fácil practicar esta técnica. La depilación con hilo requiere todo un saber hacer que se adquiere con el tiempo y la experiencia.
Si queréis iniciaros en el arte de la depilación india, debéis conseguir un hilo de algodón bastante resistente. Para tener éxito con esta técnica, la habilidad es de rigor. Realizad un nudo para cerrar el cÃrculo del hilo. Cread después un rectángulo, situando las manos en cada extremo.
Dando la vuelta a la muñeca, cruzáis los hilos en el centro hasta obtener diez torsiones. Obtenéis asà dos triángulos. Se trata de pinzar los vellos entre las torsiones del hilo y con un movimiento de las manos, se arrancan los vellos. Esta técnica parece difÃcil al comienzo, pero una vez que la domináis, podéis depilar con facilidad los vellos del rostro.
Ventajas de la depilación con hilo
La depilación con hilo es interesante por su lado natural. No se utiliza ningún tipo de producto quÃmico. Os permite depilaros sin temor a agredir la piel. Gracias a esta técnica, los nuevos vellos que crecen son más finos. Se retiran desde su raÃz, de golpe, y depilándoos de forma regular con el hilo, vais debilitando el crecimiento del vello.
Basta con utilizar un simple hilo y podéis desprenderos de los problemas que ocasionan los vellos. En cualquier caso, conviene esperar que el vello alcance una cierta longitud para poder pinzarlos con el hilo y arrancarlos. Las sesiones de depilación deben espaciarse la una de la otra.
Si la depilación con hilo no se recomienda para las piernas, puesto que se trata de una superficie demasiado amplia, tampoco se debe utilizar para las axilas por la dificultad de llegar hasta esa zona. Sin embargo es una técnica interesante para pequeñas zonas como las ceja, o el mentón.