Son muchos los acontecimientos en la vida de una mujer los que someten su cuerpo a una dura prueba. La pubertad, los regÃmenes que se repiten, y el embarazo son perÃodos sensibles para la epidermis. Esta sensibilidad puede manifestarse en la aparición de pequeñas estrÃas azuladas, luego blancas, sobre la piel.
Las estrÃas son una lesión de la piel que es el resultado de la ruptura de fibras elásticas de la epidermis bajo el efecto de un estiramiento demasiado importante de la piel o de una modificación hormonal. Las estrÃas aparecen principalmente en el vientre, los senos, las caderas, los muslos y los glúteos.
Las estrÃas se agrupan en lÃneas paralelas, adoptando una disposición frecuentemente simétrica. Al principio, suelen aparecen con cierto relieve, y de color rojizo, o violáceo. Después, toman un aspecto atrófico.
Prevención de las estrÃas
Por desgracia las estrÃas no se pueden prevenir. Ciertas personas tienen mayor predisposición. Si las cremas cosméticas llamadas preventivas no han probado nunca su eficacia, sin embargo se puede prevenir su aparición nutriendo constantemente la piel con la ayuda de un masaje y aplicando ciertas cremas. Hidratada, y relajada la piel se hace más flexible y se distiende. Menos estirada, el riesgo de fisuras disminuye.
Soluciones prácticas
Una vez que aparecen las estrÃas, estas marcas pueden atenuarse. Los tratamientos médicos a base de vitamina A utilizados para estos cuidados del acné son bastante eficaces. En todo caso, conviene siempre consultar a un dermatólogo.
El uso de cristales de alúmina es una técnica que las atenúa visiblemente, y puede hacer que desaparezcan completamente, en ciertos casos. El tatuaje practicado por un dermatólogo las pigmenta de forma duradera. Los autobronceadores, siempre inofensivos, las camuflan bastante bien.