Como madres, vamos a encontrarnos en diversas ocasiones con dudas sobre acuerdos legales antes de qué estos cumplan los 18, es decir, la mayoría de edad.
Entre muchas cosas podemos encontrarnos con qué nuestro hijo quiera tener un contrato de movil, ponerse un tatuaje, operarse el pecho o firmar un contrato laboral. En todo caso en estos contrato hay dinero de por medio, por ello es necesario tener claro cuáles son nuestros derechos sobre ellos, como madres.
Es necesario saber que todos los contratos que están firmados por menores son validos, aunque como padres nosotros tengamos el derecho de anularlos. Nuestros hijos pueden firmar un contrato laboral in problemas si son mayores de 16 años, si no están emancipados y llevan la autorización de los padres, es totalmente legal. Ilegal sería si nuestro hijo tuviera meno de 16 años e intentaran hacerle un contrato laboral ya que legalmente no es admisible (sólo es posible en el mundo del espectáculo, nuestro hijo puede hacer cine o teatro siendo menos y más pequeño de 16 años con una autorización previa de la autoridad laboral).
Por lo que respecta al contrato del móvil, no se pueden hacer contrato a menores. De hecho existen casos de compañías que han sido denunciadas tras haber realizado contratos a adolescentes menores de 14 años, inscritos en la lista de morosos por haber aceptado ofertas sin saber las consecuencias que conllevaría hacerlo.
En el caso de la cirugía estética e algo distinto. Para empezar, para determinar si la menor puede o no realizar cualquier tipo de cirugía es necesario hacerles un test psicológico para determinar la madurez mental del adolescente. Aún así es recomendable esperar hasta los 18 año para realizar cualquier tipo de cambio estético ya que fácilmente podemos cambiar de opinión , o incluso cambiar nosotros por cuestiones biológicas.
Lo mismo ocurre con piercings o tatuajes, sin DNI no peden realizarlo, y si lo hacen, pueden ser sancionados, denunciados y clausurados.
