En esta época del año es legÃtimo tener ganas de una piel más morena. Todas sabemos que se trata de algo sexy, y que es capaz de subir la moral. Además ahora que se acerca la época de vacaciones a muchas nos gusta estar morena antes de irnos de viaje. Es bueno saber que 15 minutos de rayos UV en cabina corresponden a 30 minutos de sol intenso bajo los rayos del trópico.
Autobronceador para la cara: La nueva generación de autobronceadores oscurece la piel de una manera natural. En cualquier caso, si tenéis una piel clara, debéis elegir un autobronceador para hombre, que contiene menos DHA. Utilizad sólo un poco de producto, puesto que demasiada cantidad da enseguida la impresión de un bronceado «poco natural».
Los primeros rayos: No porque el sol parezca algo tÃmido que no debéis dejar de protegeros. Las terrazas de un café, los paseos al aire libre… son momentos para proteger la piel del sol. Para vivir un verano al máximo de vuestra belleza, debéis dejar que el color moreno vaya apareciendo de manera progresiva, por eso es bueno llevar siempre en el bolso un tubo de crema con una protección del 15.
El bronceado de ciudad: Para que vuestra crema de dÃa os sirva de protector solar, le podéis añadir, justo antes de la aplicación, algunas gotas de SPF. Hoy en dÃa, muchas marcas presentan productos que sólo contienen SPF.
Preparación de la piel: El aceite de zanahoria tiene un alto contenido en vitamina A, y E. Es bueno que lo apliquéis a diario sobre el cuerpo y el rostro, dando masajes a base de movimientos suaves. El brillo de la piel está garantizado con este método. Lo mejor es decantarse siempre por un aceite biológico.
Cuidado con las nubes: Si bien es verdad que las nubes no muy gruesas filtran el sol, de igual modo, la trayectoria de los rayos UV no se detiene. Por eso, no debéis fiaros de los dÃas «nublados». Estas jornadas son las más peligrosas para la piel. ¿Por qué? Porque esos dÃas se tiene tendencia a quedarse más tiempo en la playa, sin cubrirse la piel, provocando normalmente una serie de quemaduras muy poco agradables.
Reparación de la piel: Nunca es tarde para reparar la piel. A pesar de los cuidados que solemos aplicar sobre la piel, los daños siguen existiendo. Para una correcta reparación de la epidermis, se deben aplicar mascarillas hidratantes, al menos dos veces a la semana, especialmente en verano, que es cuando el sol consigue destruir muchas más células de la piel.