En una relación de pareja, la comunicación, es fundamental. Dentro de este contexto, se producen graves errores. Por ejemplo, es un error hablar a gritos porque las cosas no se entienden mejor así.
Al revés, los gritos producen una agresividad verbal y el interlocutor se aleja. También es un error caer en el punto contrario: utilizar el silencio como norma después de un enfado no permite a una pareja adquirir el aprendizaje necesario a nivel emocional para gestionar los conflictos.
¿Qué puedes hacer para solucionar las discusiones de pareja?
1. En primer lugar, utiliza tu experiencia y sabiduría en las relaciones personales para reducir los conflictos. Por encima de ser tu pareja, estás ante una persona. Y como tal, no es tan diferente de tus padres, tus amigos o compañeros de trabajo.
Pon en práctica las habilidades sociales que desarrollas en cualquier contexto profesional para cuidar mejor de tu pareja utilizando una palabra mágica para solucionar los conflictos: “Lo siento”. Del mismo modo, también puedes decir: “Me pongo en tu lugar, te comprendo”.
2. Aprovecha el momento de la comida para charlar de forma tranquila sobre el tema pendiente de resolver.
3. No te levantes de la mesa cuando escuches algo que te incomode. Está claro que las discusiones de pareja no son agradables para nadie, pero si sales huyendo ante el primer obstáculo no te permites aprender y avanzar para tener una visión más realista del amor.
4. Dale tiempo a tu interlocutor. Es decir, puede que necesite madurar la información y reflexionar sobre la charla. No esperes que te dé la razón de forma sencilla. Además, tú también tienes que reflexionar sobre la conversación que habéis tenido para valorar si eres tú quien está o no en lo cierto.
5. No dejes que el orgullo sea más importante que el amor que sientes hacia tu pareja.