Cambiarse de vivienda es ley de vida. En la actualidad es normal que antes de comprarnos un piso, antes vivamos durante un tiempo determinado en otro de alquiler. La inestabilidad del trabajo y los cambios fortuitos de la vida pueden hacer además, que tarde o temprano, acabemos cambiando de ciudad o incluso de paÃs, es por ello que debemos saber cómo preparar bien una mudanza.
Organizar una mudanza es más complicado de lo que parece. Para empezar hay que saber perfectamente qué es lo que nos vamos a llevar y lo que no. Una mudanza es la ocasión perfecta para hacer borrón y cuenta nueva. Deshacerte de aquello que está de más o que no haces servir desde hace tiempo, como aquellos apuntes de la universidad que no has vuelto a tocar desde que te licenciaste, puede ser una buena idea.
El segundo paso será empaquetarlo todo. Para ello lo mejor será que nos hagamos con algunas cajas cómodas y baratas que podemos encontrar en los bazares o en las grandes superficies comerciales. SerÃa conveniente que comprásemos cajas de diferentes tamaños y distintas durezas, sobre todo para los objetos frágiles como puede ser platos, vasos o copas. Además recuerda anotar con rotulador permanente que es cada cosa para no hacerte un lÃo cuando te toque desempaquetar.
El tercer paso es el de transportar todas las cajas y muebles al nuevo piso. Hay gente que prefiere hacerlo él mismo con ayuda de unos amigos (siempre puedes invitarlos luego a una pizza con cola), pero sino hoy en dÃa existen servicios muy económicos de empresas que se encargan de realizarte la mudanza e incluso montarte el mobiliario, ahorrándote tiempo y esfuerzo.
Una vez todo montado y las cajas dispuestas podremos empezar a reordenarlo todo. Esta es la oportunidad para hacer los cambios que siempre habÃamos querido hacer, comprar organizadores para la ropa o los zapatos y comprar alguna que otra cosa nueva para la casa como excusa. Y ya está, ¡ya puedes empezar a disfrutar de tu nueva casa!