Puede que a tu hermano no le cuentes tus secretos sentimentales y te sientas más cómodo hablando de esos temas con otra persona.
Ser un buen hermano es algo mucho más profundo:
1. Valora el poder de las raÃces familiares porque dos hermanos han compartido una infancia común: recuerdos con los abuelos, juegos en el parque y travesuras. No rechaces todo aquello que forma parte de tu esencia.
2. Dos hermanos forman parte de una misma familia pero pueden ser completamente diferentes en ideas, valores y formas de pensar. Por tanto, asume esta realidad y acepta a la otra persona tal y como es.
3. Una de las ventajas de la convivencia es que terminas conociendo muy bien a la otra persona. Utiliza este conocimiento en positivo: evita tocar ciertos temas de conversación con tu hermano cuando sabes que siempre terminan en conflicto. En cambio, potencia esos planes en común que os unen más.
4. El dÃa del cumpleaños de tu hermano, no pierdas la buena costumbre de comprarle un regalo especial. Piensa en sus gustos para hacer una buena compra.
5. Ten en cuenta que los padres quieren a sus hijos por igual, por tanto, no metas a tus padres de por medio en los conflictos con tu hermano esperando que ellos se posicionen de lado de uno o de otro. No eres un niño, por tanto, recuerda que como adulto puedes tomar tus propias decisiones.
6. Existen planes recomendados para compartir con un hermano: ir al cine, organizar una tarde de compras, hacer una excursión, ir a la piscina…
Cuida de tu familia y disfruta de tus hermanos.