Tener una figura bonita, músculos tonificados es el deseo de todas nosotras y para ello, además de la dieta realizamos ejercicios que nos permitirán lograr ese objetivo.
Sin embargo, existen zonas de nuestro cuerpo que son un poco rebeldes y que nos llevan más trabajo para estar en condiciones, como es el caso del abdomen. Además, con la llegada del verano esta zona queda más expuesta a raíz de los trajes de baño por lo cual es imprescindible ponerla en forma de inmediato.
Entonces nos preguntamos ¿qué hacer para lograr ese abdomen perfecto?
Es allí donde surge el tema de los abdominales, un tipo de ejercicio que para muchas puede resultar una especie de tortura, a pesar que la solución no siempre está en someternos a extenuantes sesiones de abdominales para deshacernos de esa grasa abdominal.
Es posible lograr un abdomen perfecto, y esto no siempre debemos traducirlo como tener un abdomen totalmente plano y marcado, mantener formas armoniosas también es importante.
El excederse haciendo abdominales no es la solución a este tema, ya que ejercitarlo debe también resultar beneficiosos para sentirnos bien, en caso contrario lo más seguro es que surjan dolencias sobre todo en la zona de la espalda baja, debiendo conseguirse además una armonía entre lo estructural y lo funcional.
Desde un punto de vista de su función los abdominales tienen un objetivo importante que se relaciona con la postura, ya que refuerza la cara anterior del tronco y le otorga estabilidad a la columna vertebral ya que mejora los movimientos de esa zona.
En tanto que en todo aquello relacionado con la estructura los abdominales poseen un diseño anatómico que está de acuerdo a la funcionalidad que se determina por el recto abdominal, oblicuo interno y externo además de la pared abdominal llamada transverso.
Si ambos criterios son armónicos se logrará un abdomen perfecto.
La mujeres poseemos un porcentaje mayor de materia grasa que los hombres, a pesar que ellos acumulas más grasa en esta zona.
Es fundamental tener en cuenta que es mucho más importante que la masa muscular que se encuentra debajo de la grasa acumulada en el cuerpo tenga “tonicidad”. Por ello una postura correcta y la forma en cómo se realizan los abdominales es motivo de debate, ya que no todos los profesionales en el tema están de acuerdo en este punto. Algunos sostienen que la ejecución de abdominales debe ser lenta y otros dicen que lo mejor son muchos movimientos en un tiempo corto de ejecución. No existiendo sin embargo, fundamentos científicos que avalen una u otra postura.
Por otra parte, la mayoría de nosotras nos preocupamos en ejercitar sólo esa zona con el objetivo de lograr el abdomen perfecto, pero para nuestra sorpresa no sólo este tipo de ejercicios serán los que nos ayuden a tener una pared abdominal firme y tonificada. Existen otros ejercicios que pueden dar su aporte para desarrollar mejor esta zona de nuestro cuerpo.
La pared abdominal podemos estimularla tanto con movimientos localizados como con otros que abarquen distintos músculos. Todo esto además debe complementarse con una alimentación baja en grasas, además de ingerir nutrientes adecuadas a cada persona o sea una dieta personalizada.
Al hacer ejercicios abdominales debemos guardar una armonía y no dejar de lado las otras zonas del cuerpo como espalda y glúteos ya que allí está el secreto de una figura armoniosa.
Debemos además completar el trabajo abdominal con ejercicios de tipo cardiovascular uno de los entrenamientos más efectivos si deseamos eliminar los “rollitos”.
Fortalecer los músculos y entrenar la flexibilidad de la musculatura en general es indispensable, sobre todo en lo que se refiere a la musculatura posterior del cuerpo, que como consecuencia de la acción de la fuerza de gravedad, está sometida a una gran tensión diaria.
Así por ejemplo algunas alternativas de práctica de ejercicio abdominal serían:
- Ejercicio 1: De pie y con postura recta contraer el abdomen lo máximo que sea posible, terminando la contracción se repetirá el ejercicio por diez veces.
- Ejercicio 2: Acostada en el suelo, rodillas flexionadas, se colocan las manos a los lados de la cabeza y se elevan los hombros cuidando de no despegar la espalda del suelo y manteniendo esta posición por 5 segundos para luego bajar lentamente.
- Ejercicio 3: Acostada en el suelo, manos a los lados de la cabeza, subir las piernas en dirección al techo hasta formar un ángulo de 90°. Manteniendo esta postura y elevar los hombros y después bajar lentamente.
Buena alimentación baja en grasas, mejorar la postura, hacer ejercicios de forma integral nos darán una figura armónica y un abdomen perfecto, además de un estado saludable.