Si eres de las personas que practica actividad fÃsica habitualmente utilizar y saber cómo entrenar con pulsómetro se hace indispensable para el cálculo de ciertos parámetros como por ejemplo la frecuencia cardiaca máxima.
La frecuencia cardiaca es el número de veces que el corazón se contrae durante un minuto o sea los latidos por minuto.
El óptimo funcionamiento del organismo requiere entonces que el corazón actúe bombeando sangre hacia los órganos y que esto sea realizado a una presión determinada (presión arterial) además de una determinada frecuencia.
La importancia que tiene este proceso hace entonces que quienes practican deporte de forma asidua utilicen un pulsómetro además de conocer el mecanismo correcto para beneficiarse con sus informaciones.
El pulsómetro es un monitor de frecuencia cardiaca que permite realizar los entrenamientos de una forma más inteligente y controlada ya que permite llevar un mejor control del ritmo cardÃaco. Nos permite entonces utilizarlo como un indicador del funcionamiento del corazón expresado a través del número de pulsaciones por minuto.
Para quienes practican deportes como el ciclismo por ejemplo, esta es una herramienta de gran ayuda sobre todo cuando se entrena para competiciones.
Lo primero es conocer el ritmo cardiaco máximo y para esto existen dos métodos uno de ellos es medirlo en una prueba de esfuerzo máximo y el otro es calcularlo utilizando fórmulas de ritmo cardÃaco máximo que se realizan dependiendo de la edad.
Las pruebas clÃnicas de esfuerzo realizadas utilizando bicicleta o cinta para correr realizadas por cardiólogos o fisiólogos son la forma más precisa de determinar el ritmo cardÃaco máximo individual, siendo además aconsejable para personas de más de 35 años o que tengan sobrepeso, lleven vida sedentario o posean un historial de enfermedades cardÃacas en su familia.
Para utilizar de forma correcta un pulsómetro es necesario conocer la frecuencia cardiaca en reposo, que varÃa normalmente de una persona a otra siendo importante comprobar que luego de realizar un ejercicio continuado el ritmo cardiaco vuelve a ese valor inicial.
Otro de los parámetros a tener en cuenta es la frecuencia cardiaca máxima (FCM), un cálculo sencillo que se consigue restando la edad de la persona a 220 en el caso de un hombre y de 226 cuando se trate de una mujer.
Partiendo de este valor de FCM es posible utilizar el pulsómetro para determinar el nivel de esfuerzo deseado.
De esta forma existen:
- Ejercicio moderado (50-60% de la FCM)
- Control de peso (60-70% de la FCM), se fortalece el corazón pero no se produce dolor muscular.
- Umbral aeróbico (70-80% de la FCM) un nivel de pulsaciones con el cual se logra una clara mejora del nivel fÃsico.
- Umbral anaeróbico (80-90% de la FCM) mejora la capacidad cardiaca y respiratoria.
- LÃnea roja (90-100% de la FCM): El oxÃgeno conseguido no alcanza los niveles demandados por las células y es solo aconsejable para deportistas de élite.
Con la utilización del pulsómetro se logra entonces una adecuación del entrenamiento realizado  algo que hoy es posible obtener debido al avance de la tecnologÃa que llega a un nivel de precisión excelente de los datos.
Asimismo,existen pulsómetros que permiten descargar los resultados obtenidos en ciertas aplicaciones y programas informáticos que son de gran ayuda para hacer una valoración adecuada tanto del esfuerzo realizado como de los logros que se alcanzan en cada entrenamiento.
El pulsómetro ofrece al los deportistas la posibilidad de mantener un control excelente de su entrenamiento, logrando con ello mejorar de forma importante los resultados.