Ya se sabe que las suegras suelen ser complicadas, sobretodo al principio, cuándo aún no nos conocen y en lo único que piensan es en asegurarse de qué ninguna harpÃa se haya quedado con su hijito. Si no quieres tener que lidiar una lucha interminable con tu futura suegra, intenta caerle bien desde el inicio siguiendo los siguientes consejos:
– Sé detallista: si es la primera vez que vas a comer a su casa, trae el postre. Es algo que a todos nos gusta: un pastel de nata, un brazo de gitano o cualquier otra reposterÃa. Le encantará. También suelen gustar las flores o los bombones, algo dulce para suavizar ese primer encuentro. Ayudarla a preparar la comida o a poner la mesa, también es una buena oportunidad para demostrar que eres una chica educada, aunque ella insista en que no, quedarás de maravilla.
-Intenta ser discreta: todos tenemos secretos inconfesables, como aquella fiesta en la que bebimos hasta perder el control o aquella vez que nos acostamos con un desconocido del cuál por no acordarnos, no nos acordamos ni de su cara. Sin embargo, debemos intentar que estos detalles no salgan a relucir la primera vez. Más vale pecar de chica humilde y discreta que no de fresca. Además, ¿quién quiere una lagarta para su hijo?
– Piensa en cosas que podáis hacer todos juntos: aunque pueda ser un engorro, llevar a cenar a tus suegros a algún lugar diferente (un restaurante griego, un japonés) o hacer turismo por algún pueblecito de montaña, puede hacerte ganar un par de puntos.
– Llévatela de compras: sobretodo si tu chico es hijo único, no habrá nada que le pueda hacer más ilusión a tu suegra que te la lleves de compras por el centro comercial, algo que su hijo y su marido seguro que detesta.
Si sigues estos consejos, no lo dudes, serás como aquella hija que siempre quiso pero nunca tuvo, ¡qué suerte!