El melocotón es una fruta que tiene la facultad de quitar la sed e hidratar el organismo gracias a su 87% de agua, además contiene pocas calorÃas, puesto que sólo proporciona 56 kcal. Se trata de una fruta rica en potasio (200mg/100g), en fósforo y en magnesio, que contribuyen a la mineralización del organismo y le ofrecen muchas virtudes diuréticas.
También es una importante fuente de provitamina A, puesto que cubre el 50% de nuestras necesidades diarias. Gracias a sus antioxidantes, el melocotón protege las células del cuerpo que se ven afectadas por los radicales libres que conllevan el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, cánceres y envejecimiento.
El melocotón es una ruta con una tasa alta de vitamina C, flavonoides, minerales y vitaminas B, B3, B5, y E. Su pulpa ayuda al organismo a fortalecerse renovando las células de la piel. Cuando está maduro, el melocotón es una fuente importante de fibras tiernas que mejoran la digestión, el tránsito intestinal y previenen de enfermedades cardiovasculares.
El melocotón es una fruta muy suave, ideal para la alimentación de los niños a partir de los cinco meses. El melocotón forma parte de la fruta del verano por excelencia, perfecta como saciante, gracias a su zumo refrescante y sabroso.
El melocotón en todos sus estados
El melocotón es una fruta que se come perfectamente madura. Se trata de una fruta que desprende un aroma perfumado y su color no tiene nada que ver con su grado de madurez. El melocotón se degusta en todas sus formas: natural después de pelarla, crudo o en ensalada de macedonia, en dados, etc. En definitiva, se trata de una fruta muy sabrosa. También se puede comer cocido, en tarta, en sirope o en vino tinto.
Una forma curiosa de prepararlo es en papillote, sola o acompañada, pero también se puede consumir como entremés, con lechuga y una salsa a base de yogur. Condimentada puede ser un buen acompañamiento con el pescado o el pollo.
El melocotón se degusta igualmente en helado, en sorbete, e incluso como licor, macerado en aguardiente. El melocotón es una fruta que se conserva en lugar fresco durante varios dÃas. Se debe evitar ponerlo en la nevera para no alterar su sabor.
El congelador es el lugar ideal para conservarlo una vez pelado, cortado en dos y sin el hueso, añadiendo un poco de ácido ascórbico o zumo de limón. De esta manera se conserva durante ocho meses.