A lo largo de todo el año, el objetivo es tener un vientre plano, unos bonitos glúteos, una silueta bien diseñada. Si os falta tiempo para ir al gimnasio, existen ejercicios prácticos que se pueden realizar en casa. Realizados a diario durante 10 a 15 minutos, pueden ser muy eficaces.
Para unos abdominales perfectos
Para este ejercicio hay que trabajar lo que se llaman los grandes rectos. Se trata de los abdominales situados debajo de las costillas y que llegan hasta el pubis. Hay que tumbarse en el suelo con la espalda hacia abajo, se levantan las piernas hasta formar un ángulo de 90 grados. Para comenzar se puede utilizar una silla. Luego se colocan las manos por detrás de las orejas, los codos bien abiertos hacia el exterior y el mentón pegado al pecho.
Una vez bien colocados, se levanta lentamente la parte superior de busto respirando con profundidad. Hay que intentar tocar las rodillas y mantener la posición algunos segundos. Luego se expira bajando suavemente el tronco sin tocar el suelo. Conviene no curvar la espalda para que el ejercicio sea eficaz. Este ejercicio conviene hacerlo 5 veces, en series de 20 para los principiantes.
El trabajo de los glúteos
Para este ejercicio conviene colocarse de pie detrás de una silla, con la espalda bien recta. Con el fin de mantener el equilibrio, se colocan las manos sobre el respaldo de la silla. Antes de comenzar el ejercicio, hay que contraer el vientre. Una vez a gusto en la posición, el ejercicio puede comenzar. Se levanta levemente una pierna sobre el costado. El pie debe estar flexionado. Luego se vuelve a poner la pierna en su posición natural, siempre con un movimiento de baja amplitud. El pie no debe tocar el suelo.
Después de 15 repeticiones, se coloca el pie en el suelo y se hace lo mismo con la otra pierna. Conviene hacer 5 series de 15 repeticiones con cada pierna. Este ejercicio es un buen medio para definir los glúteos y trabajar el músculo medio del glúteo. También contribuye a reducir la grasa de esta zona del cuerpo.
Unos muslos firmes y tonificados
Este ejercicio está particularmente bien adaptado para aquellas que quieren tener unos cuádriceps bien definidos. Estando de pie con la espalda y la cabeza rectas, se separan los pies a la altura de las caderas. Las manos están juntas y extendidas hacia adelante. Después, se baja lentamente hasta formar un ángulo de 90 grados con las piernas, empujando los glúteos hacia atrás.
Luego se remonta tras varios segundos, apoyándose en las piernas. Para comenzar está bien con 5 series de 10 repeticiones. Otra variante de este ejercicio es hacerlo apoyándose en la pared, y bajar suavemente hasta que las piernas formen un ángulo recto. No olvidéis inspirar durante la subidas, y espirar al bajar, a lo largo de todo el ejercicio.