La imagen que proyecta el espejo es el reflejo de tu propia esencia. Sin embargo, una persona puede no observar de forma objetiva su propia imagen, algo que puede dar lugar a un autoconcepto negativo.
Asà ocurre, por ejemplo, cuando una persona centra su atención en aquellos rasgos y cualidades que observa como defectos y, sin embargo, no es capaz de expresar una caracterÃstica positiva sobre sà misma. Este es uno de los rasgos más visibles de una persona con baja autoestima. Le cuesta reconocer su propia valÃa personal.
Desde el punto de vista fÃsico, la búsqueda de la belleza en una sociedad en la que la imagen parece tan importante, puede derivar en la preocupación emocional por aspectos que resultan inevitables con el paso del tiempo. Por ejemplo, las lÃneas de expresión. ¿Cómo superar el sufrimiento que puede generar el sÃndrome del espejo?
1. Evita el perfeccionismo
El perfeccionismo aplicado a la propia imagen corporal resulta doloroso para quien siente que no está a la altura de las expectativas de un concepto de belleza ideal. Evita este tipo de pensamiento y recuerda que cada persona tiene una luz propia.
El perfeccionismo te hace sufrir porque te lleva a experimentar una lucha constante entre cómo te miras en el espejo y cómo te gustarÃa verte en realidad.
2. No te compares con otras personas
Vivimos en una sociedad muy visual: imágenes de Instagram, portadas de revistas de moda, selfies… Sin embargo, más allá de los estÃmulos externos que recibes, es importante que evites caer en el efecto de la comparación porque cuando caes en esa trampa, apagas tu propia luz interior al posicionarte en un rol de inferioridad.
3. Acepta los elogios que recibes
Cuando una persona tiene una autoestima baja suele desconfiar de los elogios que recibe por parte de su entorno más cercano, suele creer que no son expresiones sinceras.
A partir de ahora, cuando una persona cercana a ti te comente una valoración positiva, por ejemplo, cuando alguien te dice que te favorece tu nuevo corte de pelo tras ir a la peluquerÃa, simplemente, di gracias.
Intenta mirarte a ti misma a través de la mirada de aquella persona que te valora y te aprecia de forma incondicional.
4. Cultiva tu interior
El sÃndrome del espejo pone de manifiesto las inseguridades internas y emocionales. Es decir, va más allá del propio plano fÃsico para alcanzar el ámbito psicológico. Por todo ello, intenta poner en práctica medidas que te ayuden a fortalecer tu resiliencia emocional.
Por ejemplo, contacto con la naturaleza, lectura de libros de autoayuda, ocio cultural, compañÃa de amigos optimistas.
5. CuÃdate
El cuidado personal es un signo de autoestima. A través de la moda, por ejemplo, puedes proyectar tu mejor versión cuando encuentras tu propio estilo.
Sin duda, el sÃndrome del espejo produce mucho sufrimiento. La aceptación incondicional es un acto de autoestima necesaria para vivir con optimismo ese momento ante el espejo. Lejos de mitos que generan tanto sufrimiento como la búsqueda de la eterna juventud o la perfección constante.
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